Me resulta imposible
resumir en una breve entrada todo lo que el Prof. Ángel Corbí nos enseñó sobre
la fisiología de los macrófagos y su papel dual en el control de la respuesta
inflamatoria. Y, más aún, resumir cómo esos mismos datos y observaciones nos
hacen vislumbrar lo mucho que aún no se sabe.
(Macrófago detectando y fagocitando bacterias. Reproducida de
http://ingrid-a-zbook.blogspot.com.es/2009/06/m-macrophage.html )
Pero eso es la esencia de
la investigación: un buen resultado no es el que simplemente responde una
pregunta científica, sino el que permite plantearnos nuevas preguntas en mayor
profundidad. Porque la Ciencia no es solo una lista de respuestas, sino sobre todo de preguntas
por resolver.
Ángel nos ilustró sobre
cuándo un proceso inflamatorio pasa de ser beneficioso, (por ejemplo, en respuesta a una infección) a dañino (cuando se cronifica). También nos contó cómo se van
conociendo algunas de las bases moleculares y celulares implicadas en dicho
efecto dual. Pero, casi a partir de ahí, todo son nuevas preguntas para
conocer si se podrían modular dichos efectos de manera específica dependiendo de
cada enfermedad y de la fase de la misma. En ello nos va el tratamiento de
enfermedades altamente prevalentes en nuestra sociedad.
La investigación que nos ha hecho conscientes de este doble papel, beneficioso y perjudicial, de los macrófagos y la respuesta inflamatoria es relativamente reciente. De momento, lo que no es poco, ha expandido nuestro conocimiento sobre el tratamiento de procesos inflamatorios agudos. Pero, sin duda, en los próximos años nos llevará a desarrollar nuevos tratamientos para aquellas enfermedades en las que, en mayor o menor grado, se está caracterizando un papel perjudicial de los procesos inflamatorios crónicos: las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, las enfermedades neurodegenerativas, la diabetes, la obesidad, la depresión,…
Ángel nos ha dejado los enlaces de los vídeos que mostró:
http://www.youtube.com/watch?v=suCKm97yvyk
http://www.youtube.com/watch?v=ocSptPUBbuo
http://www.youtube.com/watch?v=iVMIZy-Y3f8
http://www.youtube.com/watch?v=6x9AaQD0pG8
La investigación que nos ha hecho conscientes de este doble papel, beneficioso y perjudicial, de los macrófagos y la respuesta inflamatoria es relativamente reciente. De momento, lo que no es poco, ha expandido nuestro conocimiento sobre el tratamiento de procesos inflamatorios agudos. Pero, sin duda, en los próximos años nos llevará a desarrollar nuevos tratamientos para aquellas enfermedades en las que, en mayor o menor grado, se está caracterizando un papel perjudicial de los procesos inflamatorios crónicos: las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, las enfermedades neurodegenerativas, la diabetes, la obesidad, la depresión,…
Ángel nos ha dejado los enlaces de los vídeos que mostró:
http://www.youtube.com/watch?v=suCKm97yvyk
http://www.youtube.com/watch?v=ocSptPUBbuo
http://www.youtube.com/watch?v=iVMIZy-Y3f8
http://www.youtube.com/watch?v=6x9AaQD0pG8