PRÓXIMA CHARLA


PRÓXIMA CHARLA:


"Siguiendo el rastro de los olores", Laura Lopez-Mascaraque, Investigadora Científica del CSIC en el Instituto Cajal, presidenta de la Red Olfativa Española. Moe Club, C/ Alberto Alcocer 32, Madrid, miércoles 24 de abril a las 19:00.


La relación causa-efecto

Si 100 personas cogen un objeto y lo sueltan en el aire, en los 100 casos caerá, salvo que estén en ingravidez. La gravedad es la causa de que los cuerpos caigan hacia la tierra; la caída de los cuerpos es uno de los efectos de la gravedad. Todos tenemos esa experiencia y Newton, como científico, trabajó para plasmarla en una fórmula física, la Ley de la Gravitación Universal, que refleja una perfecta  relación (matemática) causa-efecto.

Pero la relación no es siempre tan sencilla de establecer, mucho menos en términos matemáticos. Además, normalmente no tenemos una experiencia personal tan amplia (¿Cuántos cientos de veces se te ha caído o has tirado algo?) e inequívoca (¿Cuántas veces no ha ido hacia abajo?). Ello nos lleva a malinterpretar otras experiencias puntuales. Si 100 personas, incluso estando bien diagnosticadas de una infección bacteriana, toman un antibiótico probado mediante ensayos clínicos como efectivo para dicha infección, no todas se curarán. Puede haber problemas de resistencia bacteriana al antibiótico, de mala absorción del medicamento, de susceptibilidad personal por el estado general de salud, etc. No es que no haya una relación causa-efecto, es que es más compleja y hay que seguir investigando para delimitarla mejor.
Por último, si a 100 enfermos se les trata con una sustancia sin capacidad de curar, un placeboalgunos se curarán. En este caso la relación causa (tratamiento)-efecto (curación) no existe. El efecto placebo sí existe y las causas psicológicas y neurológicas que permiten la curación, incluso cuando la sustancia empleada en el tratamiento no tiene ninguna capacidad de curar, se están investigando.

De todo ello hablaremos en próximas charlas Ciencia con chocolate.

Ciencia con chocolate surge del convencimiento de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular de la necesidad de la divulgación científica rigurosa.